En el Instituto Humboldt nos caracterizamos por la exploración continua de nuevas maneras de conectar vitalmente a los colombianos con la biodiversidad. Estamos convencidos de la importancia de la producción y puesta en circulación de contenidos de base científica con un enfoque divulgativo que llegue a más personas, a través de lenguajes, formatos y canales no convencionales, con el fin de ampliar el conocimiento en biodiversidad, valorar nuestro capital natural y aprender -como en este caso- jugando y divirtiéndonos. Así es como nace la idea de crear nuestro propio animalario, un producto que hace parte de la conmemoración de nuestros 25 años de trabajo incansable.

Y otra de las razones que nos llevaron a crear el primer animalario de la fauna colombiana, es porque el conocimiento de nuestra biodiversidad ha sido posible, gracias a la vocación de, pioneros nacionales, aquellos rebeldes de espíritu aventurero que abrieron caminos -valga la literalidad- sentando los cimientos de la expedición e investigación en biodiversidad del siglo XVIII: el naturalista Jorge Tadeo Lozano y el botánico y multifacético Francisco José de Caldas. Por supuesto a quienes siguieron sus pasos en los siglos posteriores: la agrónoma y botánica, Gloria Galeano; el llamado “Padre de la Ecología” y creador de los Parques Nacionales Naturales, Jorge “El Mono” Hernández; el sacerdote y botánico, Enrique Pérez Arbeláez; el herpetólogo, Federico Médem; y el naturalista, Francisco Javier Matís; este producto también está dedicado a ellos.