Futuro de la biodiversidad colombiana: conocer para decidir
Los recientes incendios en la Amazonía brasilera han desatado una cantidad importante de reacciones, entre ellas una petición común: la urgencia de generar acciones, desde el Gobierno Nacional y autoridades provinciales de Brasil y de los demás países amazónicos, para afrontar lo que podría llegar a ser una tragedia ambiental de repercusiones regionales y globales, al poner en riesgo la mega diversidad biológica y los servicios que provee este importante ecosistema: abastecimiento de agua, almacenamiento de carbono, regulación climática, entre otros.
Desafortunadamente, este no es el único problema ambiental al que nos enfrentamos como especie. El pasado 6 de mayo en París, la
Plataforma Intergubernamental Científico-normativa sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas (IPBES), de la cual Colombia es miembro desde el año 2012, presentó la
Evaluación Global de Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos, un informe extenso elaborado por 145 expertos y 310 colaboradores de 50 países, que evidenció cómo la biodiversidad disminuye a tasas sin precedentes en la historia de la humanidad. Las cifras son desalentadoras: alrededor de 1 millón de especies de animales y plantas están en peligro de extinción; las emisiones de gases de efecto invernadero se han duplicado desde 1.980 generando un aumento de 0.7 grados en la temperatura global; y el 75% de los ecosistemas terrestres, 40 % de los ecosistemas marinos y 55% de los cauces han sido alterados severamente por acciones humanas.
La IPBES, a través de sus evaluaciones, busca precisamente atender la necesidad de fortalecer la relación entre ciencia-política-sociedad, brindando a quienes toman decisiones información técnica y científica relacionada con la conservación, uso y gestión sostenible de la biodiversidad y sus relaciones con el bienestar humano, para su priorización en los planes, programas y políticas ambientales, y de crecimiento y desarrollo económico.
En este marco, y para apoyar el
Programa de Trabajo 2014-2018 de la IPBES, el
Centro Mundial de Monitoreo de la Conservación del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (WCMC - PNUMA por sus siglas en inglés), propuso desarrollar pilotos de evaluaciones nacionales de biodiversidad y servicios ecosistémicos. Como resultado de lo anterior, en octubre de 2017 Colombia, Vietnam, Camerún y Etiopía iniciaron la formulación de sus evaluaciones. En 2018 se sumaron Azerbaiyán, Bosnia-Herzegovina, Granada y Camboya.
En Colombia, este proceso avanza bajo la coordinación del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Colciencias y el Instituto Humboldt, con el apoyo de Invemar, Parques Nacionales Naturales, IDEAM y WCMC-PNUMA; y gracias al trabajo coordinado de 85 expertos provenientes de diferentes áreas del conocimiento y regiones, y con representación de pueblos indígenas, campesinos y afrodescendientes.
Este importante grupo de expertos tienen el reto de, en ocho capítulos, examinar el estado actual, tendencias y escenarios futuros de la biodiversidad; sus motores de pérdida y transformación; su influencia en la economía y bienestar de la gente; los diversos sistemas de conocimiento; los impactos vigentes y futuros de políticas y sistemas de gobernanza sobre las contribuciones de la naturaleza para la sociedad; y los vacíos de conocimiento que deben priorizarse.
A lo anterior se suma otro reto: el ser no solo un país megadiverso sino también multicultural. En reconocimiento a lo anterior, y en concordancia con nuestras realidades en el territorio, la Evaluación Nacional se constituye en la primera (en la historia de IPBES) en abordar en un capítulo específico, y no únicamente como tema transversal, los conocimientos y relaciones de las comunidades étnicas y locales con la diversidad biológica que les rodea. Así, se buscará visibilizar la importancia de los distintos saberes sobre la naturaleza, para promover su vinculación real y efectiva en la toma de decisiones para la gobernanza del territorio.
Los resultados de la Evaluación Nacional se publicarán en 2020, y permitirán a la sociedad colombiana reconocer de dónde venimos, cómo estamos y hacia dónde nos dirigimos, para ofrecer opciones normativas y de política, que permitan al país un manejo apropiado de su diversidad biológica, dentro de un esquema que combine la conservación y el crecimiento.
Publicado el día 16 de septiembre de 2019 | Por: ENBSE