Le gustan las abejas, la vida del campo y el buen café, es estudioso, meticuloso,entregado a lo que le apasiona, actualmente es apicultor. Mateo Carvajal Cardona es el hijo mayor de Dora y Pedro, nació y creció rodeado de las verdes montañas, el frío de las mañanas y los cultivos de aguacates en la finca de sus abuelos, ubicada en un pueblo del oriente antioqueño. Desde pequeño lo cuestionaba entender el por qué de las cosas convirtiendo sus tardes después del colegio en “salidas de campo”, para luego llegar al gran laboratorio: su casa; donde coleccionaba insectos y rarezas que se iba encontrando en los caminos.
Desde pequeño sabía que el estudio sobre temas relacionados con la vida era lo que le apasionaba. Ingresó a la Universidad de Antioquia a estudiar una licenciatura en ciencias naturales, donde redescubrió su pasión por los insectos y la educación. Fueron años de grandes sacrificios, pues se desplazada desde su pueblo a la gran ciudad diariamente para cumplir con sus labores académicas, haciendo que valiera mucho más la pena cada momento de su formación profesional. Ahí mismo tuvo la oportunidad de realizar un intercambio académico por un semestre en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, sin duda una gran experiencia a nivel profesional y personal que le permitiría estar inmerso en la cultura y conocerla a profundidad.
Mateo ratificó su interés por los insectos en el momento que por convicción decidió tener su propio apiario y meliponario. Desde esa misma labor diaria del campo y el cuidado, comenzó a enfocar sus esfuerzos en temas relacionados con las abejas, dándole el valor a sus productos y sin duda, al arduo trabajo de los apicultores. Una vez culminados sus estudios de pregrado se presentó con éxito a la maestría en Entomología de la Universidad Nacional de Colombia. Aquí comenzaba otra historia para este licenciado en ciencias naturales.
Un naciente investigador en las Fibras de la Ecoreserva La Tribuna
Pertenecer al Programa Apoyos a la investigación del proyecto Fibras fue una de las mayores motivaciones de Mateo. Su rol en la línea de investigación de Himenoptera, específicamente en las abejas, le ha permitido descubrir lo “apasionante de hacer ciencia para transformar un territorio, sobre todo las comunidades”, aportando significativamente a la biodiversidad de la Ecoreserva La Tribuna, ubicada en Neiva Huila.
Otro de los logros significativos de este joven antioqueño, ha sido dar a conocer la diversidad biológica y la ecología de las abejas a partir del estudio del polén en la ecoreserva La Tribuna.Carvajal destaca que todos esos pequeños organismos son de vital importancia para el sostenimiento de una red trófica, la cual ofrece diferentes servicios ecosistémicos para las personas y que sirve “casi como el único medio de consumo para las plantas”.
Los Biomonitores y estudiantes, dialogo de saberes entre la ciencia y lo empírico
Compartir con los biomonitores, las personas de la comunidad, es algo que impacta en un primer momento. Pues para este joven Licenciado en ciencias naturales, ver como habitantes de una comunidad se fueron apropiando rápidamente de conocimientos y conceptos que generalmente son utilizados en un contexto académico, “es algo muy emotivo que desde mi rol como profesor y futuro entomólogo, es bastante significativo y hace creer que este tipo de proyectos tienen un valor enorme para transformar las visiones de un territorio y sobre todo para favorecer procesos donde se requiere conservar ecosistemas y conocer la biodiversidad que habita en ellos”, argumenta Mateo.
Finalmente una de esas experiencias que se quedarán grabadas para siempre en la mente de este joven, fue una salida de campo del 2021 donde estudiantes como él y biomonitores trabajaron en conjunto en un taller sobre genética. “ver el esfuerzo del instituto en llevar una gran cantidad de material para poder procesar los ejemplares y poder trabajar a la par con los biomonitores es algo que definitivamente no se va a olvidar”